¿Conoces los síntomas y causas de la apendicitis?
La apendicitis es la inflamación del apéndice, una bolsa en forma de dedo que se proyecta desde el colon en el lado inferior derecho del abdomen.
Para entender mejor lo que ocurre, voy a explicar qué es el apéndice y cuál es su importancia.
El apéndice es un asa intestinal, comunicada con el ciego (el inicio del intestino grueso), que no tiene continuidad en uno de sus extremos. Su aspecto de tubo móvil pequeño y estrecho recuerda a un gusano en movimiento, por eso se le denomina apéndice vermiforme.
Investigaciones recientes apuntan a que en ese “asa” de pequeño tamaño existe un reservorio de bacterias intestinales que permitiría recuperar la flora intestinal tras una enfermedad que la destruyese o sustituyese, por ejemplo, una gastroenteritis prolongada.
Además, el apéndice es un órgano linfoide. Eso significa que en su pared existe un importante número de células que pertenecen al sistema inmune, a las defensas del organismo, como las que hay en las amígdalas de la garganta o en los ganglios.
Causas de la apendicitis
La causa más frecuente de la apendicitis es la obstrucción en el recubrimiento del apéndice que da como resultado una infección. Debido a esta infección, las bacterias se multiplican rápidamente y hacen que el apéndice se inflame, se hinche y se llene de pus. Si no se trata inmediatamente, el apéndice puede romperse produciendo otras complicaciones.
Complicaciones
Algunas de las complicaciones graves que puede producir la apendicitis son:
- La perforación del apéndice: Esto puede causar que la infección se expanda por el abdomen (peritonitis). Esta afección puede poner en riesgo la vida y es necesario hacer una cirugía de inmediato para extraer el apéndice y limpiar la cavidad abdominal.
Acumulación de pus que se forma en el abdomen: Si el apéndice se revienta, es posible que se cree una acumulación de pus por la infección (absceso). En la mayoría de los casos, el cirujano drena el absceso introduciendo un tubo a través de la pared abdominal hasta el absceso. El tubo se deja colocado durante aproximadamente dos semanas y el paciente recibe antibióticos para combatir la infección.
Una vez que se elimina la infección, se hace una cirugía para extraer el apéndice. En otros casos, se drena el absceso y el apéndice se extrae de inmediato.
Síntomas de la apendicitis
Los síntomas de la apendicitis pueden variar y puede resultar difícil de detectar en niños pequeños, adultos mayores y mujeres en edad reproductiva.
El primer síntoma a menudo es el dolor alrededor del ombligo o en la parte media del abdomen superior. Este dolor puede ser leve al principio, pero se vuelve más agudo e intenso con el paso del tiempo.
Algunas señales de alarma a tener en cuenta son: pérdida de apetito, náuseas, vómitos y un bajo grado de fiebre.
El dolor tiende a desplazarse a la parte inferior derecha del abdomen, concentrándose en un punto directamente sobre el apéndice conocido como el punto de McBurney. Esto ocurre con mayor frecuencia tras 12 – 14 horas después del comienzo de la infección.
Algunas actividades que pueden empeorar el dolor son: caminar, toser o hacer movimientos súbitos.
Los síntomas tardíos incluyen:
- Escalofríos y temblores.
- Heces duras.
- Diarrea.
- Fiebre.
- Náuseas y vómitos.
El lugar donde se siente el dolor puede variar, dependiendo de tu edad y la posición del apéndice. Durante el embarazo, el dolor parecería provenir de la parte superior del abdomen porque el apéndice se encuentra más alto cuando se está embarazada.
Diagnóstico
Lo primero que el sanitario realizará cuando se sospecha de apendicitis es un examen físico.
- El dolor aumentará cuando se presione suavemente sobre el cuadrante inferior derecho del abdomen.
- Una exploración rectal puede encontrar sensibilidad en el lado derecho del recto.
Si se realiza una analítica de sangre, con una alta probabilidad se hallará un porcentaje alto de glóbulos blancos.
Los estudios de imagen que pueden ayudar a diagnosticar la apendicitis son:
- Tomografía computarizada del abdomen.
- Ecografía abdominal.
Tratamiento de la apendicitis
El cirujano extirpará el apéndice tan pronto como se realice el diagnóstico.
Si la tomografía computarizada muestra un absceso, se podría tratar primero con antibióticos y se extirpará el apéndice después de que la infección y la inflamación hayan desaparecido.
Los exámenes utilizados para diagnosticar la apendicitis en ocasiones pueden obtener un falso positivo y en consecuencia, la operación puede mostrar que el apéndice está normal. En este caso, el cirujano podría extirpar el apéndice y continuar con una exploración en el resto del abdomen para buscar otras causas del dolor.