Hipotiroidismo
- publicado por Equipo Saluteca
- Categorías Blog, Enfermedades y afecciones
- Fecha 25 mayo 2021
¿Qué es el hipotiroidismo?
El hipotiroidismo es la situación en la que la glándula tiroidea no produce suficiente cantidad de hormonas, siendo este un problema bastante común que tiene diversas causas.
El tiroides es una glándula que se encuentra en el cuello y se encarga de producir y almacenar las hormonas tiroideas. Estas hormonas son la tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3).
Ambas contienen yodo y se liberan hacia la sangre, a través de la cual llegan a los diferentes tejidos del organismo, donde ejercen funciones muy importantes y variadas.

Causas del hipotiroidismo
Autoinmunes
La causa más frecuente es la enfermedad tiroidea autoinmune.
Nuestro sistema inmunológico se encarga de defendernos contra agentes “agresores”, como bacterias, virus…
En las enfermedades autoinmunes, por razones que no se conocen completamente, pero que tienen alguna base genética, este sistema funciona mal, y “confunde” algunas partes propias del organismo con agresores externos, dando lugar a una respuesta inflamatoria dañina.
Cuando esto ocurre en el tiroides, se produce una inflamación, generalmente crónica, que puede alterar su correcto funcionamiento en grado variable.
A estos cambios se les conoce también como tiroiditis linfocitaria o tiroiditis de Hashimoto (que es el nombre del doctor que lo describió por primera vez). Puede ocurrir a cualquier edad, aunque es más frecuente en adultos y en las mujeres.
Quirúrgicas
La extirpación quirúrgica de la glándula completa (tiroidectomía total) dará lugar invariablemente a hipotiroidismo. La extirpación parcial de la misma puede cursar a veces con un funcionamiento insuficiente del resto del tiroides.
Respuesta al tratamiento para el hipertiroidismo
Los tratamientos que se emplean frente al hipertiroidismo (enfermedad por un funcionamiento excesivo del tiroides), pueden causar hipotiroidismo: los medicamentos antitiroideos pueden hacerlo de forma transitoria, por exceso de dosis y, la terapia radiometabólica (radioyodo o yodo radioactivo) puede inducir hipotiroidismo a largo plazo.
Radioterapia
Puede aparecer como secuela de la radioterapia a nivel del cuello (usada por ejemplo en algunos linfomas, tumores de laringe o de la boca).
Medicamentos
Algunos medicamentos pueden favorecer alteraciones en los niveles de las hormonas tiroideas, ya sea por desencadenar o potenciar una enfermedad autoinmune subyacente o por otros mecanismos.
Deficiencia de yodo en la dieta
La deficiencia severa de yodo es la causa más frecuente de hipotiroidismo a nivel mundial. Sin embargo, la relación del yodo con el tiroides es bastante compleja y también un exceso de yodo puede favorecer a veces el hipotiroidismo.
Actualmente en España no existe una deficiencia de yodo tan severa como para producir hipotiroidismo y, en nuestro país, en principio la dieta tiene, salvo excepciones extremas y situaciones como el embarazo y la lactancia, poca repercusión en la función del tiroides.
Excepcionalmente el uso de algunos suplementos de algas o productos de herbolario con cantidades enormes de yodo podrían causar o agravar problemas tiroideos.
Trastornos de la hipófisis
Raras veces, el hipotiroidismo es causado por algún problema en el órgano que se encarga de dirigir el funcionamiento del tiroides: la hipófisis.
De este órgano, que está en el cráneo, sale, entre otras, la hormono estimulante del tiroides (tirotropina o TSH), que es la hormona que induce al tiroides para que funcione más o menos.
Si estas “órdenes” no llegan bien, aunque el tiroides esté sano, no podrá funcionar con normalidad.
A esto se le llama hipotiroidismo central y puede ser causado por tumores, procesos inflamatorios, malformaciones…, en dicha región.

Síntomas del hipotiroidismo
Es importante destacar que los síntomas que puede producir el hipotiroidismo son muy variables (con los mismos valores hormonales, algunas personas tendrán muchos síntomas y otras casi ninguno) y muy inespecíficos ya que pueden tenerlos también muchas personas sin problemas de tiroides.
Incluyen cansancio, mala tolerancia al frío, tendencia a hinchazón y aumento de peso, estreñimiento, sequedad cutánea, debilidad muscular, dolor y sensibilidad, rigidez articular…
Algunos son tan frecuentes en la población general, que la mayoría de las personas que presentan alguno de ellos, no va a tener hipotiroidismo, siendo imprescindible siempre un diagnóstico analítico.
De hecho, se suele recomendar un segundo análisis de confirmación, antes de establecer un diagnóstico definitivo.
Diagnóstico del hipotiroidismo
El diagnóstico del hipotiroidismo se realiza siempre a través de determinaciones hormonales en análisis de sangre.
Estos análisis serán solicitados por el médico cuando haya sospecha ante los síntomas o signos que presente el paciente. A veces se hacen de forma rutinaria como parte de análisis generales.
En estos análisis se empieza midiendo la TSH. Es la que se altera de forma más precoz, a veces años antes de que lo hagan las propias hormonas tiroideas (T4 y T3).
Hipotiroidismo primario y secundario
En el hipotiroidismo primario (por lesión de la glándula tiroides), la TSH estará elevada, ya que la hipófisis intenta compensar el funcionamiento deficitario del tiroides enviándole más hormona estimulante y sólo cuando este mecanismo ya no es suficiente, empezarán a estar realmente bajos los niveles de T4 y T3.
De éstas, se suele determinar principalmente la T4, ya que sus valores en sangre son más estables y fiables, porque que la mayoría de la T3 se produce localmente en los propios tejidos a partir de la T4 y no en el propio tiroides.
En los casos poco frecuentes de hipotiroidismo secundario por lesión de la hipófisis, la TSH puede estar disminuida o normal.
Otras pruebas complementarias
Posteriormente, se pueden hacer pruebas dirigidas a ver cuál es la causa del hipotiroidismo, si esta no es evidente.
Entre las más comunes, está la determinación en sangre de los anticuerpos antitiroperoxidasa (Ac. antiTPO), que son el marcador principal de la enfermedad tiroidea autoinmune.
No es necesario realizar una ecografía del cuello de rutina, especialmente cuando la causa del hipotiroidismo es conocida y la palpación cervical es normal, aunque podrá ser útil en algún caso, como, por ejemplo, cuando se sospeche una anomalía anatómica (sobre todo cuando se palpa un nódulo).
Tratamiento
El hipotiroidismo no tiene una cura definitiva, pero se puede tratar de forma efectiva y sencilla en la gran mayoría de los casos.
No todos los casos van a requerir tratamiento. De hecho, cuando sólo encontramos la TSH elevada, pero la T4 está aún dentro del rango de normalidad (hipotiroidismo subclínico o bioquímico) sólo se necesitará tratamiento en algunas circunstancias y puede ser suficiente con hacer un seguimiento.
El tratamiento se basa en tomar T4 sintética o levotiroxina, que está disponible desde hace años, y es idéntica a la T4 natural. La administración será en general diaria y se absorbe más eficientemente con el estómago vacío.
Existe una amplia gama de preparaciones comerciales con dosificaciones diferentes, de manera que la mayoría de los pacientes puede tener bien controlada su enfermedad con una pauta muy sencilla.
La dosis prescrita dependerá de varios factores como el nivel de las hormonas, el sexo, la edad o el peso. Para comprobar que es la adecuada habrá que realizar controles analíticos, de TSH + T4, dejando siempre transcurrir un mínimo de 4-6 semanas tras el inicio del tratamiento o cambio de dosis.
Una vez que se comprueba que una dosis es correcta, al normalizarse los análisis, suele mantenerse estable durante mucho tiempo y ya pueden espaciarse los controles a una vez al año
aproximadamente.
Excepciones y dosis
Algunas excepciones serían el embarazo, cambios muy significativos de peso, introducción o retirada de determinados medicamentos…, situaciones en las que es aconsejable incrementar la frecuencia de los controles.
La omisión de una dosis puntual un único día, no va a producir síntomas, dado que tiene una vida
media larga en sangre.
Sin embargo, la irregularidad en la toma del tratamiento puede dar lugar a deficiente control de los síntomas y a alteraciones analíticas al hacer los controles, a veces difíciles de interpretar y que pueden llevar a cambios innecesarios o incluso perjudiciales en la prescripción de dosis.
#Saluteca
Fuentes: Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, National Institutes of Health
Imágenes: Adobe Stock
También te puede interesar
Las carreras sanitarias con más salida en España
El grado de Medicina es la carrera sanitaria con más salida de España según el último estudio de U-Ranking sobre la inserción laboral de las universidades españolas. Si se tienen en cuenta únicamente las carreras sanitarias, la segunda mejor posicionada …
¿Qué es la menopausia?
La menopausia es el momento que marca el final de los ciclos menstruales. Se confirma después de que transcurren doce meses sin que se tenga un período menstrual. ¿Qué es la menopausia? La menopausia es un proceso biológico …
¿Qué es la radiocirugía estereotáctica?
La radiocirugía estereotáctica utiliza muchos haces de radiación enfocados de forma precisa para tratar los tumores y otros problemas en el cerebro, el cuello, los pulmones, el hígado, la columna y otras partes del cuerpo. No es una cirugía en …